Resiliencia mediante alianzas: construir la adaptación al clima

Mejores herramientas para los agricultores vulnerables

Los agricultores de América Central y del Sur (y de todo el mundo) ya están lidiando con los efectos del cambio climático: temporadas de cultivo más cortas, precipitaciones impredecibles, aumento de las enfermedades y plagas de las plantas y reducción del rendimiento de las cosechas. Sin acciones climáticas audaces, cultivos clave como el café y el plátano podrían convertirse en manjares raros en el futuro. Los medios de subsistencia y el bienestar de las comunidades agrícolas también están muy amenazados. Para aumentar la resiliencia, es fundamental centrarse en las poblaciones más vulnerables. Los pequeños agricultores, especialmente las mujeres, las minorías étnicas y los que tienen un acceso limitado a recursos, enfrentan impactos desproporcionados del cambio climático y a menudo disponen de medios limitados para mitigar sus efectos

Rainforest Alliance nació hace más de 37 años con el objetivo de luchar contra la deforestación, reforzar la biodiversidad y promover las buenas prácticas agrícolas. Entre nuestros objetivos globales, escuchamos las necesidades de los agricultores y las comunidades forestales y los apoyamos con soluciones naturales resilientes para adaptarse al cambio climático. Parte de ello es identificar y comprender los riesgos climáticos y los niveles de vulnerabilidad, así como desarrollar e implementar estrategias de adaptación adaptadas a las necesidades específicas de los grupos más vulnerables, garantizando que no se queden atrás.

Dotar a los agricultores de conocimientos, herramientas y recursos para adaptarse a las cambiantes condiciones ambientales puede ayudarles a ser más resilientes. Con este fin, implementamos estrategias de agricultura regenerativa y climáticamente inteligente, agroforestería, gestión forestal comunitaria y restauración forestal, donde los agricultores pueden aprender técnicas sostenibles que mejoran la productividad y reducen el impacto ambiental, como la transición a los fertilizantes orgánicos, de pesticidas e insumos químicos tóxicos a otros aprobados, la adopción de prácticas regenerativas y de conservación del suelo y el uso de fuentes de energía renovables, entre otras.

Por otro lado, entendemos que el itinerario hacia la sostenibilidad es complejo y exigente, por lo que abogamos por la responsabilidad compartida en las cadenas de suministro agrícola. Animamos a los consumidores a reconocer el compromiso de los productores con la sostenibilidad al comprar productos certificados Rainforest Alliance. Asumir la responsabilidad compartida es crucial para fomentar un sentido de implicación colectiva en el que todos estemos implicados y para concientizarnos de que las prácticas sostenibles y los esfuerzos de colaboración son la única forma de salvaguardar nuestro medio ambiente.

Un compromiso común

Creemos firmemente en el poder de las alianzas. A la hora de abordar problemas complejos, la colaboración puede marcar la diferencia. Al forjar una poderosa alianza entre empresas, comunidades locales, organizaciones regionales e internacionales, gobiernos, donantes y otras partes interesadas, ampliamos los esfuerzos de quienes viven y trabajan en las comunidades rurales más importantes del mundo. Nuestra Gestión integrada del paisaje (ILM, por sus siglas en inglés) es un magnífico ejemplo de cómo la acción conjunta de todos los agentes del paisaje (agricultores, empresas forestales, comunidades rurales, líderes locales, empresas y gobiernos) aborda desafíos que difícilmente podrían afrontarse de manera individual.

Por lo tanto, disponer de un sistema de datos integrado para todos nuestros programas, desde la certificación hasta las intervenciones paisajísticas, nos permite crear más oportunidades para lograr un mayor impacto y transparencia. Estos datos sólidos y precisos nos permiten brindar servicios de alta calidad en la implementación de prácticas agrícolas resilientes y sostenibles.

Al igual que Rainforest Alliance, ISO pretende aportar soluciones a desafíos globales como la adaptación al cambio climático mediante alianzas y el poder de reunir a diversas partes interesadas. Entre las muchas normas ISO relacionadas con el cambio climático, la reducción de los GEI, la vulnerabilidad y la adaptación, el interés principal es disponer de un marco internacional apropiado para implementar estrategias de adaptación claras.

El sistema de garantía del programa de certificación de Rainforest Alliance se basó en las normas ISO. La norma ISO 17065 nos ayudan a definir algunas de las competencias que exigimos a los auditores encargados de las auditorías de Rainforest Alliance. Dado que la norma ISO 19011 abarca los sistemas de gestión ambiental (ISO 14001), también podemos afirmar que nuestros titulares de certificados están tomando medidas para reforzar su resiliencia climática, incluidas las medidas de adaptación.

Estas normas ISO se han convertido en un punto de referencia tanto para las entidades públicas como para el sector privado, las organizaciones y las comunidades. Al adoptar el mismo lenguaje, objetivos y definiciones e incorporarlos a sus propias estrategias y procesos se fomentan la confianza, la transparencia y la responsabilidad. En última instancia, las asociaciones basadas en la confianza nos permitirán lograr cambios profundos en algunos de los problemas sociales y ambientales más acuciantes de nuestro tiempo.

La adaptación al cambio climático no es solo una cuestión ambiental urgente, sino un componente fundamental del desarrollo sostenible. Si invertimos y actuamos ya en la adaptación al cambio climático, podremos fomentar sistemas agrícolas resilientes, apoyar a los pequeños agricultores y promover la estabilidad económica a largo plazo.